Inesperadamente, desperté. Estaba conmocionada, no sabía donde estaba ni con quien, solo sabía que había abierto los ojos tras haber permanecido inconsciente sabe dios cuantas horas. Lo primero que hice fue mirarme las muñecas, ni rastro de sangre, ni rastro de las cuchillas que unas horas antes habían rasgado mi piel cuidadosamente. Me asusté, pues en el lugar donde debería de haber habido sangre o en su defecto vendas, no había nada, mis venas resplandecían tras la piel cristalina como si nunca hubieran sido degolladas a traición. Me miré, llevaba la misma ropa y todo parecía estar en su sitio. Entonces miré a mi alrededor…
(inicio de Blanco Niebla)
Cuatro personas más estaban en la misma sala, pequeña e iluminada únicamente por una lámpara de aquellas de sodio. Se miraban como si no se conocieran, con la misma expresión de asombro que yo misma procesaba. Entonces recordé. Había cogido a los niños, y sí, los maté yo misma, sus llantos no me habían dejado pegar ojo la noche anterior. A qué venían tantas quejas, son cosas que pasan, me alteré y no pude más, no recibía ayuda de nadie. Me recordarán como un monstruo porque no han sabido entenderme. ¿Ahora qué hay que hacer? ¿Esperar que alguien venga a buscarnos? ¿A dónde nos llevarán? ¿Tal vez he muerto? No recuerdo eso. Sólo tengo que esperar, alguien vendrá, siempre viene alguien.
"INICIO DE HISTORIA" DE VERDE BÓSFORO
10 de octubre de 2009
Tema: "inicio de historia"
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
qué buen rollo,no? joder, mal cuerpo que se me ha quedado
Coñe Bósforo, con lo interesnate que estaba esto y se termina nada más empezar.
Una colleja (amistosa)de mi parte ;)
La colleja bien merecida está, me hice un lío y pensé que la continuación de la historia debía ser de la misma extensión que el inicio... mea culpa
ha sido un coito interruptus!!!
No pasa nada Bósforo! Y menos con la explicación. De momento t salvas d la hoguera!! jejejjeje
Publicar un comentario